Cuando tenía alrededor de 18 años llegó a mis manos una tarjeta para hablar en teléfono público, que en aquellos años empezaba a estar en desuso, que contenía una frase que aunque en su momento me hacía sentido, no es si no hasta que lo vives que la puedes asimilar por completo:
«El que estudió está preparado para un mundo que hoy ya no existe»
Por lo cruel que parezca la cita, no es mas que la verdad, e independientemente del ramo al que hayas estudiado en mayor o menor medida con el paso de los años te darás cuenta de la verdad de esa máxima.
En mi caso particular cuando estudiaba se podía decir que era un «experto» en desarrollar aplicaciones para Windows, tenía algo de conocimiento para desarrollar páginas y aplicaciones Web, era bueno en Base de Datos y era malo en lo que se refiere a la reparación de equipos de cómputo y en el diseño y configuración de redes computacionales.
Bueno, justo cuando egresé, me percaté que el mercado no solicitaba muchos «expertos» en desarrollo de aplicaciones para Windows, pues en ese entonces lo que estaba de moda eran las aplicaciones Web. Desde allí partía en desventaja, y no, no era, porque «la escuela no te enseña nada», como muchos nos aventuramos a decir, de hecho, la escuela, aunque no era muy conocida, ha tenido varias generaciones consecutivas de alumnos sobresalientes en el área de las TICs, si no que el ritmo de actualización tecnológica que hemos estado viviendo desde los setenta es tan vertiginoso que el sistema educativo, tal y como esta (y con sus retoques menores), no puede ir a la par.
Posteriormente, a tan solo 1 año de a ver egresado, se empezaba a popularizar en el mercado aglosajon una nueva arquitectura en el desarrollo de sistemas Web, el ahora obsoleto: MVC, todo eso mientras yo trataba de «dominar» ASP.NET Web Forms, e incluso pasó por mi mente llegar a certificarme en esa tecnología y aunque no lo hice, si leí casi por completo su libro de certificación ¿Qué pasó después?
Pues, nada, solo dos años después, ya estabamos en el 2015, las aplicaciones MVC inundaban los anuncios de empleos en los portales especializados y los de Web Forms eran escasos, pero, eran mi herramienta de trabajo y en lo que yo estaba «convirtiéndome en experto»
Al año siguiente llega a mi una oportunidad laboral con una mejor posición, pero en la que tengo que retomar el desarrollo para aplicaciones Windows, y aunque por este sentido no era una buena opción, me daba la oportunidad de tener otro tipo de retos en mi carrera. Mientras esto pasaba en mi vida, el mundo estaba tomando una nueva tendencia que a la postre seria un estandar en la industria: Las APIs, y yo, la estaba ignorando.
No pasó mucho tiempo para que el mercado se inundará de anuncios de APIs y de aplicaciones MVC, por lo que ahora mi experiencia era…si…obsoleta, pero bueno, logré colocarme en un empleo donde pude emplear estas tecnologías y poner al día, aunque como te darás cuenta, esa sensación dura cada vez menos, pues mientras yo me actualizaba, el mundo ya estaba girando en otra dirección: Las SPAs y el desarrollo Cloud
Pues bueno, en este mundillo, cada vez es mas notorio que: «El que estudió está preparado para un mundo que hoy ya no existe» y es parte de nuestra obligación, si queremos permanecer vigentes en este sector, mantenernos actualizados, pues, tarde o temprano los sistemas se actualizaran (ya que la tecnología sobre la que está hecha deja de recibir soporte por parte de la empresa que la desarrolló), y será allí donde se decidirá si nuestras habilidades siguen siendo o no requeridas.
Para que esta historia no te pase a ti, lo mas sano, es que dediques algo de tu tiempo a realizar pequeños desarrollos en tecnologías emergentes, si es para tu empresa vale por tres, pues te sirve para tu conocimiento personal, tiene mas valor curricular y te ayuda a mostrar tu valor como empleado dentro de tu organización. Si esto no se puede dar busca la opción de hacer algo por tu cuenta y venderlo, subirlo a un repositorio público o bien certificarte en esta tecnología, pues aunque el aprendizaje se haya asimilado no vale lo mismo (para algunos empleadores) un desarrollo hecho en tu equipo personal para practicar que uno hecho para una empresa en particular.
Feliz semana…¡¡Y a estudiar se ha dicho!!
Los de Informática 